El 23 de octubre se cumplieron 100 años del nacimiento de uno de los máximos ídolos futbolísticos del Mate. Por las filas de Argentino de Quilmes en la primera mitad del siglo XX pasaron grandes figuras del fútbol nacional pero seguramente haya sido Juan Botasso, quien despertó la mayor admiración no sólo entre la parcialidad criolla sino de todos los seguidores del deporte más popular de los argentinos. La “Cortina Metálica” fue el único jugador de Argentino de Quilmes que jugó un Mundial de Fútbol. Supo defender nuestra casaca desde 1927 hasta 1930, para volver luego en 1938 a jugar en 2° División. Jugando para Argentino de Quilmes defendió los colores Nacionales en el primer Mundial de Fútbol jugado en Montevideo (Uruguay), obteniendo nuestro representativo Nacional el Subcampeonato y hasta fue merecedor de un Tango, "Cortina Metálica".
“… ¡la sombra de Juan Botasso!, la metálica cortina… mi frente toda se inclina ante el recuerdo del ruso, que defendiéndote puso del alma, sus vitaminas…” Juan Arrestía, el poeta nochero.
Tanta era la fama del arquero de Argentino de Quilmes por aquel entonces que era habitual escuchar decir “vamos a ver jugar a Botasso contra el club tal...”.
Juan Botasso, “La Cortina Metálica” defendió la casaca albiceleste desde 1927 hasta 1930. Luego de unos años en Racing Club, volvió al club de la barranca. Fue el único jugador Mate que jugó un Mundial de Fútbol, en Uruguay 1930. Botasso jugó la semifinal ante Estados Unidos y la final que nuestro seleccionado perdió ante los uruguayos por 4 a 2. En ese seleccionado, compartió plantel con otros grandes del fútbol argentino como Guillermo Stábile, Francisco Varallo, “Nolo” Ferreira y Luis Monti, entre otros.
Era tal la sensación de invulnerabilidad que irradiaba (a pesar de medir sólo 1,69 m), que fue apodado como la “Cortina Metálica” por el periodista Alfredo Rossi, apodado “Chantecler”. Este mote nació luego de un choque entre Racing Club y Argentino de Quilmes, partido en el cual Botasso fue la gran figura de la cancha. La revista “El Gráfico”, tituló en la crónica del mencionado encuentro: “¿Juan Botasso es el mejor goalkeeper argentino? En el match Argentino de Quilmes versus Racing su actuación fue tan sobresaliente que parecía una cortina metálica. Constituyó el principal factor de la derrota de Racing.”
Cuentan los memoriosos que luego de su bautismo como “Cortina Metálica”, cada vez que Juan Botasso entraba a jugar un partido, iba directamente al arco y fingía bajar una cortina imaginaria en su valla.
Alguna vez el diario Clarín dijo de él “siempre sereno, correcto, siempre poniendo el pecho a los vendavales, defendiendo su meta con valor temerario, con sus manos de garfio”.
Y no faltaron las crónicas de la época que con orgullo lo describían “su agilidad y su seguridad desconciertan a los rivales, que ya no saben para que lado shotear pues él solo cubre todo el arco”.
A fuerza de sus actuaciones descollantes se convirtió en ídolo del pueblo y en particular de los amantes del fútbol.
El nombre de Juan Botasso fue sinónimo de lo imbatible. Tal era su fama en la década del 30, que hasta llegaron a dedicarle un tango:
Cortina Metálica. Tango. H. Zamora y M. Padula
I
¡Arquero lindo!... ni el viento pasa;
Toda la hinchada tiene en su puño;
Vengan “balazos” que es de buen cuño,
Sólo los brujos lo vencerán;
Ferreyra estrila; Del Prete sueña…
Para él no hat “tigres” ni “torpederos”
Muchacho criollo, molde de arquero...
Con la cortina… “hum”, le harían gol.
II
La tribuna entera te saluda…
“Botasito”,
Porque sos el mago de la “hinchada”
Los Domingos sos cortina de negocio
Que al balazo desafió
Y tenés el alma dura
Frente al ojo del cañón.
I (bis)
Como bolita salta en la cancha
La “gata negra” de doce gajos,
Y están las fieras que dan trabajo…
Los dos arqueros mirando están.
Botasso ríe, de goal no hay miedo;
No hay Masantonio ni Petronilo…
Naón y Ortega muerden su estrilo
Pues la cortina bajada está.
II (bis)
La tribuna entera, etc, etc…
El 20 de marzo de 1927, Juan Botasso disputó su primer partido oficial defendiendo los colores "criollos" y gracias a sus hazañas debajo de los tres palos construyó una historia que con los años se transformó en mito y leyenda. Su debut fue contra Sportivo Palermo en cancha de éstos, siendo el resultado 4 a 2 para los visitantes, con goles "Mates" de A. Trujillo (2), S. Abella y L. Rimassa.
También el ídolo Mate tiene el orgullo de haber jugado el primer Partido Nocturno de la historia Argentina el 7 de Diciembre de 1928 en cancha de Vélez Sarsfield formando para el Seleccionado Nacional contra los Olímpicos.
Por su buena posición a la hora de pararse en el arco, por sus reflejos, por su seguridad, por su personalidad, sin lugar a dudas Juan Botasso fue todo un referente en los albores del fútbol argentino, y su trayectoria en Argentino de Quilmes ha dejado una profunda huella .
Fuente: UxM http://www.unidosporelmate.com.ar