Jesica Salomé Di Iorio, referi internacional, es una quilmeña que un día decidió que su futuro iba a estar vinculado a las canchas de fútbol cuando tan sólo tenía 15 años de edad. “En mi barrio no existían equipos ni clubes que desarrollaran fútbol femenino y como el fútbol me encantaba desde pequeña, decidí involucrarme con él a través del arbitraje, ya que jugarlo, era mucho más complicado.Al principio su familia no estuvo de acuerdo. “Consideraban que no era algo para mí, pero luego, y hasta la actualidad, el apoyo es absoluto e incondicional”, señala.
Luego de egresar de su curso de arbitraje, la joven hizo una pasantía en la Asociación del Fútbol Argentino, donde a los 21 años, firmó su primer contrato.
Ser mujer fue un verdadero “gol en contra”, en su caso: “Existe la subestimación y el prejuicio de que las mujeres no sabemos nada de fútbol. Resultó muy complicado que nos observaran objetivamente para así poder obtener el respeto y hasta el elogio de muchos, especialmente, de los hombres”.
Esta mujer no pasa inadvertida ni en los estadios de fútbol: “Es cómico; por ejemplo, al mostrar el carnet para ingresar, siempre me preguntan: ¿árbitra de hockey? ¿de handball?; nombran todos los deportes, ¡menos fútbol! O dudan de la autenticidad del carnet porque les resulta extraño que una identificación de árbitro corresponda a una mujer”. Otro detalle que sorprende en la vida de Salomé es el hecho de que sea abogada. “Es como que a la sociedad le cuesta relacionar dos profesiones tan disímiles, aunque en ambas, pretendo imponer justicia”, alega quien está acostumbrada a ser juzgada permanentemente por sus dictámenes dentro de una cancha. “El error de una mujer resalta mucho más que el de un hombre, y un acierto, pasa inadvertido”, afirma, aunque sostiene: “Si demostramos idoneidad y capacidad en lo que hacemos, las ventajas o desventajas de ser mujer en este rubro, quedan a un lado”.
Para Salomé, desempeñarse en el ámbito futbolístico pone a prueba su “carácter y personalidad”. “Si no te imponés, no podés dirigir ni mantenerte tanto tiempo dentro del arbitraje. También hay perseverancia y sacrificio constantes, con los que cada día intento superarme y lograr distintos objetivos superiores a los ya conseguidos”, asevera.
Se desempeña en las distintas categorías de A.F.A., es árbitra internacional y fue línea en el último amistoso entre Quilmes y Argentino, en el aniversario de la ciudad.