Finalmente pudo inaugurarse el viernes la feria artesanal en la Plaza Wheelwright, de la Estación.
El paseo, bautizado "Paz y Arte", no hizo honor a su nombre la primera jornada, ya que altercados sucesivos con los inconformes vendedores ambulantes del área derivó incluso en la postergación por horas del acto oficial. No sin inconvenientes pudieron las autoridades, encabezadas por el intendente Francisco Gutiérrez, llevar adelante formalmente la apertura.
Los puestos lucieron bien, casi completos. Sólo en el extremo norte hubo media docena sin ocupar.
Para la ocasión, se les pidió a los vendedores ambulantes que no fueron incorporados, que levantaran sus puestos de cajones y tablas, sólo con la justificación que fueran evitados por las miradas del jefe comunal. Pero esto no logró calmar los ánimos. Se llegaron a ver forcejeos, gritos y hasta golpes a los enchapados puestos que, a un costo de 2.000 pesos por unidad, no fueron hechos por personal municipal sino por una cooperativa, sin clara licitación.
De aquí en más hay mas dudas que certezas. La zona está saturada. Colectivos, transeúntes, vendedores y ahora el paseo "Paz y Arte", que desde su nombre, clama por una ubicación más racional, confirmando que la contradicción impuesta entre la probabilidad de las ventas y la naturaleza del artesano se vino a depositar para intentar quedarse en el punto neurálgico de la ciudad.