El Cuartel central
El 31 de octubre de 1911 nació en el partido de Quilmes la institución de bien público y de servicio solidario dispuesta a luchar contra las inclemencias del fuego y las intemperancias de la naturaleza, la Sociedad de Bomberos Voluntarios.El sábado 8 de octubre iniciaron las celebraciones con un desfile donde participaron 1200 hombres pertenecientes a 60 cuerpos de bomberos La primera sede estuvo en Garibaldi 90 y luego se trasladaron a Alem 210.El 8 de diciembre de 1932 se inauguró el emblemático cuartel de Garibaldi 318, habitado por los bomberos voluntarios durante 61 años. El progreso y la modernidad los sitúa desde 1993 en Guido 87. Sus pilares fundamentales, esencia de los bomberos, son la abnegación, el sacrificio y el desinterés
En 1911 el pueblo adelantaba, era tranquilo y veraniego, pocos ruidos y poco tránsito. Pero de pronto, después de retumbar tres granadas, se ven algunos hombres que corren por las calles del pueblo, de día o de noche; unos los conocen, otros no. ¿Adonde van? Son los Voluntarios, que acuden a cumplir con su deber. Estas escenas se suceden desde el año 1911, en que fue fundada la actual Sociedad de Bomberos Voluntarios.
De las chatas tiradas por rápidos caballos, que sacaban chispas de los empedrados, y los primitivos materiales, hoy el Cuerpo de Bomberos local cuenta con implementos modernos, con los cuales la lucha se hace más eficaz. Son orgullo de la ciudad ver las poderosas autobombas y transportes, que al llamado de auxilio salen raudas del cuartel, manejadas por diestros conductores. Esta benemérita Institución cumplió ya 65 años de vida, gracias al espíritu de sacrificio de sus dirigentes, de ayer y de hoy, y los hombres del Cuerpo Activo, que a través de los años formaron en sus filas.
Son importantes los servicios que los cuerpos de voluntarios prestan en la Provincia de Buenos Aires, salvando vidas y bienes, y sometiéndose sus componentes a la disciplina que toda institución militarizada necesita, para mantener su eficacia, subordinación y valor, en todo momento que las circunstancias lo requieran.
Por otra parte, tengamos en cuenta la economía que para las finanzas de la Provincia significan estas organizaciones, que si bien deben ser subvencionadas para que puedan afrontar su mantenimiento, muchos millones quedan en las arcas fiscales, al no pagar a cientos de servidores, que voluntariamente prestan tan importantes y meritorios favores a la comunidad, robando horas al descanso, y poniendo en muchas oportunidades en peligro sus vidas, por
vocación de servicio y amor al prójimo.Su heroe máximo es el bombero José María Sanchez que perdí su vida en el año 1956 al intentar desarmar una bomba en un atentado al tren. Así se evitó la catástrofe mayor que se hubiera producido al paso del ferrocarril.Fue ascendido a Oficial 2º post mortem. Hoy en día la calle de la tragedia, Salta, lleva el nombre de este mártir civil, además de una calle del partido de Berazategui. El 2 de junio de 1981, en la celebración del día del Bombero Voluntario Argentino, se bautizó a la E.G.B. 69 sita en la calle Larrea 3922 de Ezpeleta, “Bombero Voluntario José María Sánchez”.
Fuente: El Quilmero blog