Fueron muchas las veces que fuimos al Río y nos rodeó la basura, en las calles, en el parque, pero sobretodo en el murallon y en la playa. Grata fue la sorpresa últimamente, cuando se pudo disfrutar del césped sin más que céspedPero además un murallón limpio en toda su extensión, solo con algunas hojas secas, algo bastante más difícil de encontrarY.Y por último, arena y agua, sin basura, un éspectáculo tan lógico como utópico en Quilmes. Esta foto fue tomada al pie del primer escalón y no tiene fotoshop.
Por lo que concluímos que algo está empezando a cambiar al menos en el Río. Esperemos que no sea solo el viento, que anda soplando del sudoeste.
Por lo que concluímos que algo está empezando a cambiar al menos en el Río. Esperemos que no sea solo el viento, que anda soplando del sudoeste.